-Estoy aburrido, Javi. Ya no somos lo que éramos. Te acuerdas de aquellas noches en Conil... -Hombre, Antonio, entonces aún no habíamos cumplido treinta. Ahora ya no volveremos a cumplir sesenta. -Ya, ya, pero entonces nos lo pasábamos muy bien. En la noche conileña... ¡que tiempos! -Sí, pero ya no estás para subir farolas... y eso de los tiempos está demasiado visto- Estos viejos, siempre pensando que el pasado era mejor que el presente. -Bueno, bueno, estoy mejor de lo que parece..... ¡ay! -No agites el bastón, Antonio, que te da la artrosis... ¿Habéis visto a mi hermana? -Esta en el baño, Nata, retocándose para el casting de canguros. -¿Para Canguros? si eso fue hace treinta años. -¡No jodas!.... Pero era verdad. Este salto me había sentado fatal. No recordaba nada de los últimos años, como si no existieran. Tal vez no existían. Pero lo más normal es que estuviera perdiendo la cabeza porque recordaba todo como si lo hubiera vivido, aunque vinieran a mí de pronto, como los flashback
Blog personal del historiador y escritor Javier Fornell. Un viaje por una vida pasada, futura e imaginada.