A veces, la vida te da sorpresas. Unas negativas y otras positivas. Tengo que reconocer que en lo últimos tiempos han sido muy positivas y eso me ha hecho alejarme del mundo virtual en el que tan cómodo me movía. Apartarme de este rincón, en el que tantas veces amenazo con volver, y centrarme en otras cosas: mi mujer, mi familia, mis amigos o mi trabajo. También, no lo voy a negar, en otro tipo de escritos. Hasta hace relativamente poco, con mi Tesis doctoral, ahora con mi nueva novela.
Pero sé que le debo mucho a este pequeño rincón. Aquí comencé a publicar mis historias, mis anécdotas, presentes y pasadas, de una vida que se asemejaba bastante a la mía. Aquí me fui forjando como escritor, aunque esa palabra siga quedándome muy grande. Por eso, ahora que emprendo un nuevo proyecto profesional y que escribiré algunas entradas para el blog de Sur Tour me he propuesto volver aquí de forma más o menos seriada. No será diario como siempre hice, pero si de forma semanal.
Pero sé que le debo mucho a este pequeño rincón. Aquí comencé a publicar mis historias, mis anécdotas, presentes y pasadas, de una vida que se asemejaba bastante a la mía. Aquí me fui forjando como escritor, aunque esa palabra siga quedándome muy grande. Por eso, ahora que emprendo un nuevo proyecto profesional y que escribiré algunas entradas para el blog de Sur Tour me he propuesto volver aquí de forma más o menos seriada. No será diario como siempre hice, pero si de forma semanal.
Tampoco será el mismo rincón de hace un año (¡yo no soy el mismo!) y variará lo narrado. Seguiremos mostrando algo de Historia (si todo sale bien, me veréis la cara, sino seguirá siendo escrito), historias cotidianas que no necesariamente me habrán ocurrido a mi, y algo de patrimonio.
Así que hoy, no hago más que desear que, realmente, pueda cumplir mi cometido.
Así que hoy, no hago más que desear que, realmente, pueda cumplir mi cometido.
Comentarios